Con la participación del intendente de Ñuble, Martín Arrau, el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, la directora nacional de Sernatur, Andrea Wolleter junto a otras autoridades nacionales y locales, representantes gremiales, universidades y servicios públicos, el jueves 8 de agosto se desarrolló la actividad Ñuble Piensa en Grande en la Casa Central de la Universidad de Chile.
En la instancia, un equipo de profesionales del Instituto de Asuntos Públicos (INAP) de la Universidad de Chile expuso los avances en la elaboración de la Estrategia Regional de Desarrollo (ERD) de Ñuble 2020-2028, proceso en el que asesora al Gobierno Regional de Ñuble desde mayo de este año, al adjudicarse el proyecto por licitación pública.
La ERD es una planificación técnica para definir los grandes objetivos de Ñuble, una hoja de ruta con mecanismos e indicadores de seguimiento. El Gobierno Regional de Ñuble estará trabajando en este proyecto, con la asesoría del INAP, hasta diciembre de este año. Según explicó Marcelo Ramírez, jefe del proyecto de asesoría, la ERD implica “pensar cuál es la imagen-objetivo de la región al año 2028”, es decir, cómo debería ser y verse Ñuble.
“Éste es un proyecto técnico que apoya un proyecto político y social de largo plazo y que va mucho más allá de un gobierno o de una autoridad regional. Es un instrumento que trasciende a los gobiernos, por lo que la participación organizada de los sectores más relevantes de la región es un camino necesario para darle viabilidad política y sostenibilidad en política pública”, explicó el director del Instituto de Asuntos Públicos, Hugo Frühling.
El intendente de Ñuble, Martín Arrau, agradeció a la Universidad de Chile y planteó las posibilidades que se abren a partir de este trabajo. “Lo que tenemos en Ñuble hoy día son oportunidades, es un libro en blanco. Cuando se han creado algunas regiones en Chile eran otros tiempos. Hoy estamos en un mundo que cambia muy rápidamente y tenemos muchas oportunidades”, indicó.
La autoridad regional aseguró que Ñuble puede ser “un ejemplo para otras regiones de Chile”. “Estamos con un espíritu de trabajo en conjunto, dejando atrás la diferencia, y convencidos de que eso nos va a llevar a buen puerto”, dijo.
El rector Ennio Vivaldi reconoció el trabajo del Instituto de Asuntos Públicos en Ñuble, pues, a su juicio, “la presencia de la Universidad de Chile a lo largo del país, en su condición de universidad nacional, es clave y fundamental”.
Según manifestó el rector, la universidad está llamada a contribuir a la regionalización. “Esta es la otra cara de la medalla del trabajo que hizo la Universidad de Chile en el siglo XIX al construir la nación. Hay tendencias centralistas dadas por la geografía de Chile. Hoy, en el siglo XXI, hay mucha más conciencia de la importancia de una democracia basada en la autonomía de las personas y eso tiene relación con el desarrollo de las regiones. El pueblo chileno está exigiendo que las regiones puedan autónomamente desarrollar e impulsar su economía”, aseguró.
Desarrollo agrícola y cultivos orgánicos
El jefe del proyecto de asesoría, Marcelo Ramírez, dio cuenta de las características de la región identificadas en este proceso: es la más rural de Chile, 30,6 por ciento de su población que vive fuera de las ciudades. La gran importancia de sus actividades silvoagropecuarias es evidenciada por el hecho que el 29,6 por ciento de su suelo es de uso agrícola y tiene un 29,1 por ciento de plantación forestal. De esta producción exporta celulosa y fruta fresca, entre otros productos, y es la región que cuenta con más empresas exportadoras orgánicas en Chile, con productos como berries, manzanas y kiwis.
El intendente de Ñuble, Martín Arrau, destacó la agricultura como una de las áreas con gran potencial para el desarrollo regional, a través del crecimiento de las superficies cultivadas y de la producción orgánica, entre otros factores. “La incorporación de nuevas especies y frutales va a ir aumentando la presión sobre el recurso de mano de obra, para mejorar la calidad del empleo, exportar y generar valor. Estamos con un comité invitando a empresas a invertir en Ñuble en este rubro, que además es una industria que nos acomoda mucho por la relación con el entorno, por nuestra historia y nuestra idiosincrasia”, señaló.
A juicio de Ricardo Ariztía, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, quien también participó del encuentro, el alto nivel de población rural de Ñuble y las nuevas especies vegetales que han llegado a la región representan una oportunidad: “Hay un potencial enorme de mano de obra y de suelo. Se están realizando inversiones importantes en la agricultura”, indicó.
Destino turístico: una oportunidad
En el encuentro también se presentaron las opiniones recogidas en una encuesta realizada por el equipo asesor a representantes de gremios, universidades, cámaras de comercio y otros actores estratégicos y relevantes para la región. Allí, el turismo y los servicios aparecen como áreas de oportunidad para el desarrollo de Ñuble, mientras que la sequía y el cambio climático son vistos como riesgos.
Según datos de Sernatur, en turismo, el valle Las Trancas y las Termas de Chillán aparecen como destinos consolidados, mientras que Cobquecura y Quillón son zonas emergentes en este rubro, y San Fabián y el valle del Itata son lugares con potencial.
“Es importante que exista más infraestructura, que confluyan la inversión privada y pública para que los destinos se vayan desarrollando de mejor manera. El turismo es una industria que genera empleo, convive muy bien con otras industrias y tiene efectos positivos para la región”, planteó la directora nacional de Sernatur, Andrea Wolleter, quien participó en el encuentro. Asimismo, se refirió al potencial del turismo rural. “Hoy el turista valora lo local y la conexión con la cultura y la gastronomía local. Se puede hacer algo muy interesante y atractivo y se pueden atraer muchos turistas de regiones cercanas a Ñuble”, afirmó.
El diputado de la zona Gustavo Sanhueza coincidió en esto, “creo que el desarrollo de Ñuble va a estar dado por el turismo, que tiene un potencial enorme, y por cómo generamos una matriz productiva en base a nuestra agricultura, para darle valor agregado a lo que se produce allá”, aseguró.
Fuente: Universidad de Chile / Noticias
Texto: Mariana Ardiles, Instituto de Asuntos Públicos
Fotografías: Alejandra Fuenzalida